Caer en el mismo error o tropezar más de una vez en la misma piedra es algo frecuente en mi y, me barrunto, en mucha otra gente; creo que es consustancial al hombre. Si alguien te golpea una vez, es su problema; si ese alguien te golpea más de una vez, entonces el problema es tuyo. La solución a todo esto es sencilla, pero por norma común y general, no la practicamos. Todo ser humano se siente atraído, por diversas razones, por otros seres humanos; incluso se pueden establecer relaciones de dependencia que, a la larga, nunca aportan nada positivo. Yo, en muchas ocasiones, me he sentido atraído por gente que, consideré (o considero, no sé bien), me parecía que me aportaban muchas cosas por su intelectualidad o su forma de expresar ideas y razonamientos clarividentes o abstractos. Y en muchas ocasiones, igualmente, me equivoqué. Me equivoqué como el común porque dar más de una oportunidad a según y qué personas es establecer una relación de dependencia insana, como decía anteriormente; o lo que es lo mismo, tropezar varias veces con la misma piedra o permitir que te golpeen más de dos veces. No creo que nadie sea bueno por naturaleza ni malo genéricamente tampoco, sino que todo ser humano está en un punto intermedio que se descubre profundizando; y en profundizar se puede tardar un rato largo. El caso es que a mi algunas personas se me dirigen con ciertos argumentos peregrinos que aún no sé cómo consiento, o quizás sí: es mejor estar callado y mantenerse en paz que hablar o decir con la finalidad de herir. Quien cree en los horóscopos dice que cuando los Sagitario sacamos a pasear la ironía, el sarcasmo y otras intenciones del lenguaje podemos llegar a ser muy crueles. Intento evitarlo, porque en el fondo, para dos días que vivimos mejor estar tranquilos que bajo las aguas sulfurosas de la mala leche. Pero sí, si me vuelven a golpear debo empezar a entender que el problema lo tengo yo.
8 comentarios:
Francisco, creo que en entradas como la anterior y en esta ecuentras tu tono más interesante. Un abrazo
Francisco, creo que en entradas como la anterior y en esta ecuentras tu tono más interesante. Un abrazo
Estoy de acuerdo contigo en lo que dices de los Sagitario... Sera porque yo tambien lo soy y me callo muchas cosas. Cierto que a veces es mejor no abrir la boca y evitar problemas, no vale la pena.
Besos
Por cierto, ya van siete posts sin tus tipicas fotos de mujeres... Fran, te encuentras bien? je je je. Es broma
Yo adoro las dependencias insanas.
Me ha hecho pensar mucho este post tuyo. Estoy con Lauren en que has sacado "tu tono más interesante". Tienes razón, si uno deja que le golpeen dos veces el problema es suyo, pero por más que me lo digo no dejo de cometer también yo ese tipo de errores. Ya se sabe: errare humanum est.
Las perosnas son malas o buenas por naturaleza? esto daría para un debate más extenso...
saludos
Me he dado una vuelta por tu casa, me gusta, me quedo con esta entrada, yo he tropezado tantas veces, aún lo hago.
En fin, la vida nos enseña, pero hay que querer aprender para luego comprender y avanzar.
Un beso
pd: volveré
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