El silencio es un residuo de la inmortalidad, en donde muchos saben escucharse a sí mismos. Yo no estoy seguro, pero creo que así llego más lejos. Y Lidia también…
A veces, en la oscuridad pienso en ella, en las veces que la vi, que conviví con ella; en todos los momentos que estuvimos juntos, en todos esos ratos en que me sonreía. Y no me acostumbro, a pesar de todo, a vivir con ella.
La soledad.
Algunos días es una terrible compañera.
A veces, en la oscuridad pienso en ella, en las veces que la vi, que conviví con ella; en todos los momentos que estuvimos juntos, en todos esos ratos en que me sonreía. Y no me acostumbro, a pesar de todo, a vivir con ella.
La soledad.
Algunos días es una terrible compañera.
2 comentarios:
Creía que hablabas de otra Soledad ;)
Ah pero aveces es la compañera que uno necesita. Yo, que para estos días, amo intensamente, también busco la esquina oscura en donde puedo estar yo-con-yo, suspirando encerrado en un cuarto vacío. Y luego, cuando de ella me agoto, vuelvo al aliento cálido de quien amo.
¡Qué bonito lo que has escrito! Saludos.
F.
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